Que sorpresa (Scorpius Malfoy)

Volvía de la lechucería. Si querías privacidad la noche siempre era una buena confidente.
Caminaba a paso lento con las manos en los bolsillos, despreocupado. El dormitorio estaria vacio o tranquilo. Albus habia vuelto a escaparse, hacia noches que hacia eso y no le habia preguntado. Creía que no me daba cuenta, pero ya llegaría el momento de la confrontación.
En una de las ventanas vi una figura, por la luz de la luna que atravesaba la ventana vi sus cabellos rojos.
Ni de noche me dejas tranquilo.
Me acerqué en silencio a ella, hasta que estuve detrás.
- ¿No deberías estar en los brazos de morfeo? -susurré cerca de su oido.
Portaba un short corto que me permitia ver el largo de sus piernas.
Le miré esperando el contra ataque. Rose Weasley nunca se quedaba sin decir lo que pensaba.

Miraba la nada distraída sumida en el silencio de la noche hasta que alguin susurro a mi oído, reconoci la voz al instante, Scorpius.. Mire hacia mi costado y lo vi allí parado, con sus pelos rubios y sus ojos grises fijos en mi, me quede callada hasta que las palabras brotaron de mi

-¿Tanto me qeuires que ahora me digues durante la noche Malfoy?- dije irónicamente. Suspire y baje la vista unos segundos, luego volvi a mirara atravez de la venata, ña luna brillaba en la parte mas lata del cielo, el lago, la luna llena, era un paisaje tan hermoso… Me mordí el labio mietras miraba fijamente la luna brillar, ¿Qué me pasaba?

Lo vi de reojo y me quede asi unos segundos, - Scor…- ?-no termine de hablar pues me calle y volvi a ver atravez de la ventana.

¿Eso era toda? Debía estar sonambula para haberme contestado eso. No dejé de mirarla.
- No tientes a la suerte hermosa
Se giró de nuevo a la ventana y se quedó allí estática. De pronto pronuncio mi nombre, no completo, mi mote. Solo me llamaban de esa forma Al y Domi, para el resto era Malfoy o Scorpius.
- ¿Si? -pregunté en voz baja acercandome más a ella sin dejar de mirarla. Algo pasaba, sentia corrientes de aire electrizado, pero no era posible puesto que estabamos dentro. Podia oler el aroma de su cabello. Embriagador.
Me golpée mentalmente y me separé de ella. Minutos habian pasado desde que me habia llamado.
Esto no está bien.
- Bien si no tienes nada más que decir. Buenas noches.
Comencé a caminar hacia las escaleras. El que no debía tentar a la suerte era yo.

Ambos nos quedamos callados, todo estaba muy silencioso tanto que la situación ya pasaba a ser incomoda aunque en realidad las pocas veces que estábamos solos siempre era incomodo, tal vez por el echo que ninguno sabia que decir, como ahora. Yo observaba el paisaje nocturno sin prestarle mucha antencion. Enotnces de un momento para otro dijo buenas noche y comenzó a caminar hacia las escaleras, yo me di la cuelta y lo vi caminar. No se que fue en realidad pero fui de tras en el

- ¡Espera!- dije de inproviso- Si tengo algo que decir- ¡Pero por Merlin! ¿Qué se supone que le tenia que decir? Nada… Por que lo había detenido… Lo mire a los ojos y no se me ocurio nada que decir, - Me…. ¿me acompañas hasta mi sala comun?- ¿¡Pero que estaba diciendo!? Baje la mirada pues podía sentir mis megillas calientes debía estar roja como un tomate, un mal gen Weasley heredado de mi padre.

Me detuve en seco y giré a verla.
Seguía donde mismo.
- ¿Que sucede? -pregunté sin más. Se habían esfumado mis ganas de hacerla enfadar. Hoy no tenía interés alguno.
Su pregunta me sorprendio. No esperaba tal proposicion, y no es que no me la hayan hecho antes, pero viniendo de ella. Esto era épico. Decidí sacarle ventaja a la situación.
- ¿Estas invitandome a tu habitación?- dije en tono sugerente. La chica ya estaba roja, no crei que fuera posible que el color subiera más pero me equivoque. Incluso sus pequeñas orejas se colorearon. Me acerque de nuevo quedando a algunos pasos. - Prometo no hacer mucho ruido.
Sonreía, jamás olvidaría este momento.

Era obvio que se había sorprendio hasta yo lo había echo.. todavía no entrava en razón ¿En serio Rose Lena Weasley le había pedido a Scorpius Hyperon Malfoy que la acompañara hasta su casa Comun? La respuesta era un gran si.. Solte un suspiro cuando comenzó a hablar, y hay estaba el titpico compartamiento Malfoy ¿Qué que no podía simplemnte negar o aceptar sin burlarse?Levanete la vista ya con mi tono normal o eso pensaba yo y lo vi a los ojos.

-¿Eso es un si o un no?- le pregunte mietras miraba las escaleras.- Solo… no quiero ir …- ¿Ir…?-… sola- dije finalmente, no era buena inventando esucsas en el momento. No me servia actuar bajo presión.
Revolie los ojos y comencé a caminar sola- Olvidalo Malfoy..- dije sin mirarlo siquiera.

- Eso es un: "espero que tu cama sea cómoda."
Mis animos habían vuelto. La chica se dio por vencida y comenzó a caminar en dirección a su sala. Esperé unos segundos en dónde estaba y después avancé para darle alcance.
¿A que jugabamos?
Caminamos en silencio por un tiempo, uno al lado del otro. No tenía ni una jodida idea de lo que hacía, no me sentía como yo, no como un Malfoy, no ahora. Nunca antes haía sentido un pasillo tan interminable.
- Si no deseas volver sola, ¿entonces porque has salido?
No la miré mientras le hice la pregunta.

Luego de lo dicho comencé a caminar a un principio Scorpius se había quedado en su lugar pero luego de unos segundos estaba a mi lado. Ambos caminamos en silencio atreves de los corredores, oscuros y silenciosos. Yo me encontraba caminando mirando hacia adelante de vez en cuando lo miraba de reojo. Lo mire veloz mente cuando me hizo una pregunta y mire hacia adelante al darme cuanta que no me miraba.

-Bueno.. la verdad es que no podía dormir… por si no te diste cuenta estoy en piyama- dije bajando la mirada observando mi short y musculosa. – Y Salí a dar una vuelta.. no pensé en como volvería en esos momentos- dije terminando la de hablar. Me quede en silencio unos minutos y lo mire a lo mire mientras seguía caminando
-Y tu.. ¿Qué haces a estas horas.. solo… por aqui?- pregunte intentando sacar algún tema de conversación.

¿Que si no me había dado cuenta? Por supuesto que lo había hecho, fue lo primero en lo que reparé. Su "pijama" dejaba mucho que ver.
Sonreí y rodé los ojos. ¿Acaso no planeaba regresar? Weasley's tan despistados, o quizá tontos, como nadie.
Planeaba responderle mordazmente, ¿quien se creía para pedirme razones? pero en cierta forma tenía la culpa, habia preguntado primero.
Respiré hondo.
- Tenía asuntos pendientes.
Tampoco me confesaría ante ella. Eso tenía que bastarle. Seguimos caminando hasta que ella se detuvo. Supuse que era la entrada de la sala común de gryffindor. A decir verdad, nunca antes había estado en este lugar. Había un cuadro completo de una vieja inmesamente enorme que roncaba placidamente. Ahora tenía que bajar las escaleras de los próximos seis pisos sin contar las de las mazmorras. Hice una mueca de pensar sólo en ello.
- Que pases buena noche. - lo dije simple y sin nungo tono en especial. Mejor marcharme antes de hacer una estúpidez.

¿Asuntos pendientes? Eso no era una respuesta, pero ¿Para que me serbia iniciar otra pelea con Malfoy? De nada por lo que solté un suspiro – Claro..- dije en voz baja y me quede callada nuevamente.
Me molestaba tanto esta situación, siempre había sido muy espontanea nunca paraba de hablar y gamas faltaba un tea de conversación con migo, todo lo contrario, Hugo siempre me pedio que me callara y ahora no sabia que decir ¿Porque? Odio esto.
Luego de un rato, de haber subido las escaleras y de haber llegado al séptimo piso me pare frente a la dama gorda que dormía tranquilamente, que envidia, si yo lo pudiera haber echo desde un principio no estaría aquí ahora.
Cuando Malfoy se despidió no se por qué lo agarre de la muñeca- Espera- dije me acerque a el – Gracias por acompañarme- dije en un tono bajo- En serio no quería… volver sola…- ¿Que hacia? ¿Por qué no podía dejarlo ir, no me iba a dormir y ya?

Quizá fue el contacto entre nosotros o el hecho de tenerla cerca y no poder tenerla. Seguir siendo un gilipollas con ella no era una opción, no ahora, no en este momento. La miré, la miré como nunca antes. Ella estaba allí de pie, y sentía que había algo que no me decía.
Tomé su mano y la empuje suavemente hasta topar con la pared. Acerqué mi mano libre hasta su rostro y recorrí con la yema de mi dedo sus labios. Me incline sobre su cuerpo, mi rostro cerca del suyo, cerro los ojos pero en el último momento me detuve, sin llegar a tocarnos nuestros alientos se mezclaban.
- ¿Crees que esto esta bien?
Podía ver sus gruesas pestañas y sus pecas, adoraba esas pecas, eran como un cielo con estrellas.
No esperé una respuesta, sabía que no, sabía que no era buena idea, que más tarde ninguno aceptaría que esto paso.
Y entonces la besé, apenas un roce y luego lo profundice, acaricié su lengua con la mía, moví una de mis manos a su espalda baja y la atraje hacía mí. Capturé su labio inferior y lo mordisquee un poco, hasta que nos quedamos sin aire. Me separé lentamente y la miré, aun tenia los ojos cerrados.

Senti como chocaba contra la pared pero no me importo, lo mire a los ojos mientras recorría mis labios. Cuando se acerco a mi podía sentir como mi corazón aseveraba cada vez mas y mis mejillas se tornaban coloradas entonces de detuve y pude escuchar el susurro de su voz, ¿Si esto estaba bien? Claro que no lo estaba, nisiquera podía creer que esto estaba pasmado.

No espero mi respuesta pues luego de unos segundos sus labios estaban sobre los míos cerré los ojos y deje que todo pasara, deje que me hacercara aun mas a el, que mordisque mis labios, le devolví el beso mientras rodeaba su cuello con mis manos, dejando todos mis pensamientos atrás, tratando de no pensar en que diría mi padre mi familia si em viera en estos momentos.

Se separo de mi cuando nos quedamos sin aire, respire pfodundo y abrí los ojos nuevamente, ¿Que había echo? Habia dejo pasar lo que yo no me animaba hacer, lo que siempre me recomía la cabeza. Al verlo a los ojos mordí mi labio inferior mientras mis labios dibujaron una pequeña sonrisa. ¿Por que lo hacia? Por que era l oqeu tanto qeuria quería sentir sus labios sobre los míos, por que no soportaba ver como coqueteaba con todas las chicas del colegio.. por que esto no podía pasar, por que técnicamente éramos enemigos desde antes de nacer..
- No podemos hacer esto- dije simplente mientras los soltaba, no qeuria hacerlo pero no era lo que qeuria sino lo que tenia que hacer..

Dulce tentación, oh mierda, tenía que dejar de ver sus labios, húmedos, suaves, carnosos...
La tenía atrapada aún contra la pared, sus brazos al rededor de mi cuello, y se sentía bien, se sentía jodidamente bien, como si todo encajara. Y entonces me soltó, tarde un par de segundos en entender lo que estaba diciendo.
¿Decepción? o quizá resignación, no sabía lo que era, al parecer mi vida estaba en punto muerto en el que nada de lo que yo quisiera podía ser posible.
Me separé de golpe, hasta el otro extremo.
Disfrútalo mientras dure.
Era hora de volver a la realidad, dónde peleábamos, nos insultábamos y pasábamos el uno de otro.
Me acerqué nuevamente, rocé ligeramente mis labios contra su frente.
- Buenas noches.
Era la tercera vez que repetía esas palabras, comencé a caminar hacia las escaleras, en el fondo esperaba que dijera de nuevo mi nombre, no estaba seguro de lo que haría; pero no escuche más su voz. No regresé la mirada, la última imagen que quería de ella era así con los ojos cerrados y una sonrisa en sus labios.
No regresé directamente a mi sala, vague libremente por algunos minutos más hasta que el sueño pudo más que mi voluntad. Me arrastré hasta mi habitación, Albus ya se encontraba en su cama. Me dejé caer en la mía y cerré los ojos.
Mañana sería otro día.

Luego de soltarlo se alejo de mi, no pude evitar soltar pequeño suspiro y bajar la vista había sido maravilloso mientras duro, sabia que esto no iba a durar para siempre, ¡Por Merlin! por que lo había terminado, era un tarada, siempre intentando hacer las cosas bien ¿Y si esto no era lo correcto? Y si por una maldita vez podía hacer lo que en verdad quería y no hacer lo que debía.

Note que se acercaba nuevamente pero no como antes.. Senti un fino rose de sus labios contra mi frente, cerré los ojos y los deje hacia, aveces llegaba hacer tonto como me hacia sentir. ¨Buenas noches¨ fueron sus simples palabras que ya había escuchado como nose dos o tres veces saliendo de su boca set noche. Comenzo a caminar hacia las escaleras, se estaba llendo. Tenias ganas de pedirle por favor que se quede, que no se valla pero no, simplemente me quede callada viendo como se iba.

Me apolle contra pared nuevamente lentamente fui cayendo hasta quedar sentada. Me tire el cabello para atrás mientras miraba hacia arriba y solte un otra gran suspiro.

Yo era Rose Weasley y el Scorpius Malfoy, no podía hacer esto, simplemente lo había empezado a odiar sin saber siquiera su nombre. Siempre me había parecido fantástico ser una Weasley, nunca me había quejado pues era fantasico, pero ho después de tantos año maldecía mi apellido, maldecía el Apellido Malfoy, maldecía la maldita rivalidad entre estos.

ME pare luego de unos largos minutos pensando y recordando, y me dirigí al cuadro de la dama gorda. Esta seguía durmiendo y que surte pues si hubiera visto eso…. Luego de despertarla, entre a mi sala común, estaba vacía y callada, el silencio gobernaba por aquí, mire a mi alrededor y subí las escaleras para dirigirme hacia mi dormitorio. Al entrar vi mi cama vacía tal y como la deje, me ahcerque a ella y me acosté. Al cerrar los ojos vino velozmente la miguen, la senciacon de ten sus labios obre los míos, sonrei y me tape hasta la nuca.